las visitas de este día me hacían particular ilusión ya que no conocía nada de la Costa Azul y lo que te viene a la mente son mansiones, yates, cochazos, vistas espectaculares y lugares de ensueño. Estuve en Niza y Mónaco y la verdad dudo que alguien se pueda quedar impasible ante tanto lujo y glamour. Fué un día genial desde el desembarque que fue en Villefranche, una pena no haber tenido tiempo para visitarlo, tenía mucho encanto.
Y como anécdota, ¡qué risa por favor!, tuve lo que llaman la suerte de principiante jugando a la ruleta en el Casino de Montecarlo. Había un sólo jugador con aspecto de potentado saudita que apostaba grandes cantidades cada ronda e indefectiblemente perdía. Alrededor de la mesa una miríada de curiosos entre los que me encontraba yo. Animada por mi chico saqué ¡10 euros! y con ademán de mujer de mundo pedí fichas al croupier. La gente miraba entre curiosa y divertida. Me dió dos fichas de 5 euritos que tomé e hice girar en mi mano como si administrara un imperio. Con el arrojo que me caracteriza aposté una ficha a dos números, que, como era de esperar, no salieron. Sin dejarme vencer por el desánimo por haber perdido la mitad de mi fortuna, aposté la ficha que me quedaba poniéndola entre el 7 y otro número, ¡y salió! el siete, mi número de la suerte. Una exclamación de sorpresa se escuchó desde la concurrencia, ¡había ganado! Tuve la sensación de que el saudí me miraba raro. No me dejé seguir tentando por el demonio del juego y nos fuimos a celebrarlo. ¡Qué divertido!
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Ferry a Villefranche |


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Panorama de Niza |

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¡¡¡¡Apostando y ganando!!! |
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Palacio de los Grimaldi |
Bueno chic@s, que tengáis feliz fin de semana:)
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