¡De Madrid al Cielo!

 El comer, como el vestir, es una de las necesidades que hemos transformado en arte y en uno de los grandes placeres que nos ofrece este mundo cruel. Madrid, este poblachón manchego lleno de historias, leyendas, y lugares con encanto, rompeolas de todas las Españas, despliega sus muchos encantos gastronómicos para que nuestro romance con la ciudad sea inolvidable. Madrid se vive en la calle, en sus paseos, bares y restaurantes, y en esa cotidiana celebración de la vida, el buen comer y beber están muy presentes. 

Con sus ritos profanos nos enseña esta acogedora ciudad la importancia del disfrute de la buena mesa, que se hace eco de la variada cocina de toda España y del mundo, ya sea en un sobrio local de lujo ya sea en una de las muchas tascas castizas tan bulliciosas, pasando por los deslumbrantes locales de diseño. Todo ello con una oferta siempre renovada en una ciudad que moviéndose con el ritmo que imprime nuestro tiempo, palpita al compás de los siglos que ha visto pasar. Os propongo que os perdáis por sus calles y degustéis sus tapas, raciones y vinos, seguro que no os decepcionará y os veréis más guapas y con un nuevo brillo en los ojos.

Vestido Zara, zapatos Pertini 

¡¡Restaurante Samara, comida egipcia!!